Las botas de goma, un 'must have' para los días de lluvia

Seguramente recordarás las famosas katiuskas que allá por la década de los 70-80 solían ponernos nuestras madres para ir al colegio. Pues bien, el post de hoy va dedicado a las botas de goma, que cómo dice el título de esta entrada, se han convertido en un auténtico must have para la temporada de lluvia. Pero antes nada, veamos a qué nos referimos cuando hablamos de rain boots y cuál ha sido su origen.

Las katiuskas son un tipo de botas impermeables que en principio no llevan cordones y que protegen el pie del agua de lluvia, del barro e incluso de la nieve, llevando la suela de goma para no resbalar. 

En un principio se crearon para trabajar con ellas en el campo, para protegerse de condiciones climatológicas adversas ya que estaban hechas de caucho y vinilo. Aunque en los últimos años ha experimentado una fuerte expansión como prenda imprescindible entre las fashionistas del ámbito rural o urbano, convirtiéndose en toda una tendencia de moda.

► ¿Por qué las botas de goma se llaman Katiuskas?

El motivo por el que las botas de agua en España se conozcan popularmente con el nombre de ‘katiuskas’ proviene de una famosa zarzuela escrita por Emilio González del Castillo y Manuel Martí Alonso y música compuesta por Pablo Sorozábal, que se estrenó en el Teatro Victoria de Barcelona el 27 de enero de 1931.

Dicha obra musical llevaba como título ‘Katiuska, la mujer rusa’ y la protagonista principal aparecía en escena provista de unas botas altas de media caña, las cuales recordaban a las utilizadas comúnmente en los días de lluvia.

La popularización de dicha pieza teatral hizo que rápidamente a las botas de agua se les comenzase a llamar ‘katiuskas’ debido a que muchas eran las mujeres que acudían a la zapatería y pedían ‘unas botas como las que lleva Katiuska’.


En cuanto al nombre, Katiuska, es un diminutivo familiar y cariñoso de Katia, forma abreviada de Ecaterina (Catalina en español).

Cabe destacar que, no tuvimos nada que ver con la invención de este tipo de  bota, sino que el mérito se lo debemos al Duque de Wellington, quien en 1817 encargó a su zapatero de Londres, Hobb's, un modelo de bota para utilizar en el campo de batalla y que por la noche se pudiera llevar por debajo del pantalón. A esto se debe que las botas de agua sean conocidas fuera de nuestras fronteras como ‘Wellington boots’ o ‘Wellies’.

Como era de esperar, rápidamente se pusieron de moda entre el resto de caballeros ingleses, que no dudaron en lucir estas botas que en un primer momento estaban hechas de cuero, hasta que dieron el salto a Estados Unidos, donde comenzaron a fabricarlas de goma para aprovechar su impermeabilidad y además las tiñeron de verde camuflaje, pensando en las cacerías.

Con la Primera Guerra Mundial, las botas de Wellington dejaron de ser una moda para convertirse en una imperiosa necesidad al objeto de proteger del agua y del barro los pies de los soldados británicos en las fangosas trincheras del continente. Entre 1914 y 1918, de Edimburgo salieron nada menos que 1.185.036 pares de botas, con las factorías funcionando 24 horas para cumplir con la demanda del Ejército.

► Tendencia actual

Pues bien, si por aquel entonces nos parecían pesadas e incómodas, hoy en día han evolucionado mucho y se han convertido en un auténtico básico de armario. 

Un concepto que, en los últimos años, firmas como Aigle, Benetton, Burberry, Hunter y Gioseppo, así como las firmas low cost de moda, se han encargado de transformar en una oportunidad única de salir a la calle sin miedo a acabar con los pies mojados todo el día, evitar el frío del plástico y, por último, lucir las tendencias del momento. 

Estas botas se pusieron de moda cuando Kate Moss se puso unas Hunter para acudir a un festival. Y es que, como buena inglesa, sabe que pocos tipos de calzado resultan tan eficaces y confortables para pisar la hierba húmeda como las botas de goma que Moss combina con shorts, chaleco hippy-chic, camiseta de algodón y cazadora de cuero. 

De este modo las botas Hunter ¡se convirtieron en las botas más deseadas del planeta!, rindiéndose el mundo de la moda a este calzado que cada día da más juego en cuanto a acabados se refiere: con lazos, con tachuelas, forradas de borreguito... 

Y más allá de las típicas en rojo, azul marino o negro, ahora podemos encontrarlas de todos los colores, ya sean lisas o estampadas (de flores, de cuadros, con estampado animal print) y en diferentes tipos de caña (desde el tipo botín, pasando por la media caña hasta la de caña por la rodilla)... en definitiva, las hay para todos los gustos.

 

Esta temporada la novedad está en las botas de goma con tacón y en los colores vivos, muy presentes en botas Hunter con una experiencia de más de un siglo a su espalda.

Incluso podemos encontrarlas en versión plegable gracias a la línea Hunter Original Tour, realizadas con un material que permite que la bota sea súper resistente y que sea flexible para hacerla muy pequeña, y de esta manera poder incluírla incluso en el equipaje de mano. Entre los colores de botas Hunter plegables que podrás encontrar en la tienda online de la firma tienes el verde, el rojo, el azul y el negro; eso sí, a un precio menos asequible, ya que cuestan en torno a los 120 euros.

Una de las ventajas de este calzado es que en el mercado podemos encontrar una gama muy amplia de precios. Puedes encontrar botas de agua en grandes superficies que rondan los 12 euros, hasta auténticas firmas de vanguardia cuyos materiales hacen aún más especial este calzado.

► ¿Cómo combinarlas?

Las botas de goma son ante todo un calzado para protegernos de la lluvia, por lo que se recomienda utilizarlas en estilismos informales o casual. Opta por lo tanto por prendas cómodas. El clásico look para combinar botas de agua es una blusa floja, una chaqueta y jeans. Si lo complementas con una bufanda y un gorro le darás un look más invernal a tu atuendo. Pero veamos qué opciones tenemos:

Con vestido: Combínalas con un vestido vaporoso y con un cárdigan, o con una chaqueta de lana, para conseguir una apariencia inocente y cautivadora. Un vestido a la rodilla puede verse muy bonito si tus botas son altas. Procura que el color de las botas y el del vestido combinen, pero que no sean del mismo tono, ya que de lo contrario podría verse muy sobrecargado. La gracia es que las botas resalten y se vean diferentes. Unas en color rojo o gris, por ejemplo, quedarían muy bien con un vestido negro o azul marino y unas negras podrían verse increíbles con un vestido rosa. Busca que la altura de la falda sea mediana, ni larga ni demasiado corta.

 

 

 

Con minifaldas y shorts de mezclilla, pudiendo elegir entre botas por la rodilla o tipo botín. 

Con jeans o con leggins: Puedes ponértelas con unos vaqueros pitillo metidos por dentro de las botas de agua, junto con un trench o una parka para conseguir un look más casual chic o más urbano.

 

 Veamos algunos ejemplos más:

► Consejos para cuidar las botas de goma

Normalmente estas botas de goma están fabricadas en caucho, un material completamente natural caracterizado por su elasticidad, repelencia al agua y resistencia eléctrica, pero que requiere de ciertos cuidados y mantenimiento que veremos a continuación. 

A la hora de limpiarlas tras cada uso:

• Para que tus botas duren mucho tiempo asegúrate de limpiarlas con un trapo limpio y secarlas al aire sin utilizar secadores, acercarlas a radiadores o estufas y alejarlas de la luz de sol. 

• Utiliza agua con jabón neutro para lavarlas y nunca utilices disolventes, lejía, amoníaco o cualquier otro producto agresivo. Tampoco son recomendables algunos aceites o grasas animales ya que pueden dañar el caucho. 

A la hora de guardarlas cuándo ya no se utilicen:

• Mantenlas en un lugar seco y templado.

• Para que no se deformen durante los calurosos meses de verano, mételes trapos, papel de periódico o incluso los calcetines, de este modo te aseguras de que conservarán la forma original a pesar de estar guardadas.

• Procura evitar lugares muy calientes o húmedos ya que al ser el caucho un producto natural puede afectarle y empezar a mostrar algunas rajitas o manchas blancas. 

• Envuélvelas en un trapo limpio o papel de periódico que ayudará a repeler la humedad que, a pesar de lo que todo el mundo piensa, es dañino incluso para las botas de agua. 

• Nunca las guardes deformadas o dobladas porque no te las podrás poner en la próxima temporada.

En definitiva, las botas de goma son el mejor complemento para los días de lluvia y además, una de las referencias icónicas de la moda actual. Y tú, tienes las tuyas?