Cuando hablamos de color siempre recurrimos a aquellos que más nos gustan, sin pensar demasiado si es armónico con nuestro rostro y nuestra figura (para conocer cuál es vuestro tipo de figura y de rostro podéis leer otras publicaciones del blog porque precisamente os contaba como identificarlos: Tipos de siluetas femeninas y ¿Cuál es tu tipo de rostro?).
Cuando nos ponemos un color cerca del rostro, puede aportar luz, o bien opacidad. El color transmite sensaciones, cualidades de imagen y belleza, nos puede hacer parecer más sanos, más tristes... Seguro que tienes algunas prendas en tu armario que resaltan tu belleza y siempre te dicen cumplidos cuándo las llevas. No importa si tienes esa ropa durante años o es una nueva adquisición, te sientes a gusto y sabes que te va estupendamente. ¿Cómo conseguir el efecto la mayoría de las veces? La respuesta no es difícil, se trata de conocer cuáles son los colores que te favorecen.
Cuando nos ponemos un color cerca del rostro, puede aportar luz, o bien opacidad. El color transmite sensaciones, cualidades de imagen y belleza, nos puede hacer parecer más sanos, más tristes... Seguro que tienes algunas prendas en tu armario que resaltan tu belleza y siempre te dicen cumplidos cuándo las llevas. No importa si tienes esa ropa durante años o es una nueva adquisición, te sientes a gusto y sabes que te va estupendamente. ¿Cómo conseguir el efecto la mayoría de las veces? La respuesta no es difícil, se trata de conocer cuáles son los colores que te favorecen.
En primer lugar debemos como siempre, analizarnos y conocer cuál es nuestra armonía cromática, y para ello vayamos por pasos.
1) Siguiendo la siguiente TABLA PARA CONOCER TU ARMONÍA, analizaremos nuestro color de piel, nuestro color de cabello y nuestro color de ojos. Esta es la base para descubrir nuestra armonía y así potenciar la belleza natural de cada una de nosotras.
Sólo con que dos características coincidan en la misma armonía (cálida o fría), descubrirás qué armonía tienes.
2) El siguiente paso es conocer el CÍRCULO CROMÁTICO:
El círculo cromático se divide en tres grupos de colores: los colores primarios, los secundarios y los terciarios.
Los colores primarios, son aquellos con los que se pueden obtener los demás colores: amarillo, rojo y azul. Mezclando estos colores se obtienen todos los demás colores.
Definimos como colores secundarios: verde, violeta y naranja. Los colores secundarios se obtienen de la mezcla en una misma proporción de los colores primarios.
Consideramos como colores terciarios: rojo violáceo, rojo anaranjado, amarillo anaranjado, amarillo verdoso, azul verdoso y azul violáceo. Los colores terciarios, surgen de la combinación en una misma proporción de un color primario y otro secundario.
3) Características de los COLORES CÁLIDOS y COLORES FRÍOS:
La división entre colores cálidos y fríos se logra trazando una línea en el círculo cromático desde el amarillo-verde hasta el rojo-violeta.
Los colores de uno de los lados, que contienen rojo y amarillo, son los cálidos, y en lado opuesto, el azul y los colores que contienen esa mezcla, son los fríos. Los colores verde y violeta puros son neutros y su grado de temperatura depende de la proporción en que se les adicione rojo, amarillo o azul.
Los colores cálidos (amarillos, naranjas y rojos) tienen un efecto estimulante, son colores vitales, alegres y activos.
Son colores cálidos: la gama de los dorados. Son los tonos tierra, los ocres, el café, el terracota, los amarillos y los naranjas. Son perfectos para las mujeres morenas, trigueñas o doradas.
Por el contrario, los colores fríos (azules, verdes y violetas) producen una acción relajante, y relacionados con el agua y el invierno.
Son colores fríos: la gama de los plateados. Son los tonos grises, todos los azules, los morados, el lila, los rosados, el fucsia y el borgoña. Son perfectos para las mujeres de piel clara, blancas y blanco rosadas.
Para saber más podéis consultar otras de mis publicaciones que hacen referencia a la armonía de color, a los colores cálidos y fríos, y a la combinación de estos colores:
La división entre colores cálidos y fríos se logra trazando una línea en el círculo cromático desde el amarillo-verde hasta el rojo-violeta.
Los colores de uno de los lados, que contienen rojo y amarillo, son los cálidos, y en lado opuesto, el azul y los colores que contienen esa mezcla, son los fríos. Los colores verde y violeta puros son neutros y su grado de temperatura depende de la proporción en que se les adicione rojo, amarillo o azul.
Los colores cálidos (amarillos, naranjas y rojos) tienen un efecto estimulante, son colores vitales, alegres y activos.
Son colores cálidos: la gama de los dorados. Son los tonos tierra, los ocres, el café, el terracota, los amarillos y los naranjas. Son perfectos para las mujeres morenas, trigueñas o doradas.
Por el contrario, los colores fríos (azules, verdes y violetas) producen una acción relajante, y relacionados con el agua y el invierno.
Son colores fríos: la gama de los plateados. Son los tonos grises, todos los azules, los morados, el lila, los rosados, el fucsia y el borgoña. Son perfectos para las mujeres de piel clara, blancas y blanco rosadas.
Para saber más podéis consultar otras de mis publicaciones que hacen referencia a la armonía de color, a los colores cálidos y fríos, y a la combinación de estos colores:
- Cómo elegir el color del cabello correcto según nuestra armonía de color
- Reglas básicas para combinar colores
En mi caso, y una vez hecho este análisis he descubierto que soy de armonía cálida, y fíjate tú por dónde, mis colores a la hora de vestir suelen ser todo lo contrario, los tonos fríos!
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