La historia de 'Lacoste' y su famoso cocodrilo

Lacoste es una compañía francesa que fabrica ropa, relojes, perfumes, zapatos, cinturones, y maletas, entre muchos otros artículos. Su producto más famoso, es su camisa Polo, hecha de tejido piqué. 

Fundada en 1933 por el francés René Lacoste, es hoy en día es un gigante muy rentable con 1.200 boutiques en el mundo y 1.600 millones de euros en facturación (90% proveniente de fuera de Francia).

► Su fundador

Jean René Lacoste nació en París en 1904. Lacoste no presentaba de joven un talento natural que lo destacara por encima del resto y su vida parecía más orientada al mundo de la educación o el estudio que al tenis. No practicó el deporte hasta cumplir los 15 años cuando lo conoció después de viajar a Inglaterra con su padre.

Su renombre mundial lo logró a través de trabajo duro, rigurosidad de entrenamiento y concentración. Fue ganador con el equipo francés (junto a Henri Cochet, Jean Borotra y Jacques Brugnon, a los que llamaban popularmente como Los mosqueteros) de la Copa Davis.

 

En 1929 decide retirarse víctima de una bronquitis crónica. Su carrera deportiva había resultado mucho más exitosa de lo esperado, gracias a su incansable trabajo. 

Creyéndose curado, vuelve a jugar en 1932 y pasa 3 rondas en Roland Garros, pero poco después se retira definitivamente del deporte. 

► El logotipo

El logotipo de la marca es un cocodrilo verde (en algunas ocasiones plateado, conservando el color rojo en el interior de su boca abierta), también conocido como cocodrilo Charles, que de varias maneras se encuentra en la gran mayoría de los productos de la firma, siendo pionera en colocar el logotipo en el exterior de las prendas.

 

Pero, ¿cuál es el origen de este logo? 

La auténtica historia del 'cocodrilo' se remonta al año 1923 y comienza con una apuesta que René Lacoste había hecho con el capitán del equipo de Francia de la Copa Davis, Allan H. Muhr, que le prometió una maleta de piel de cocodrilo si ganaba un partido importante para el equipo. 

Este episodio fue objeto de un artículo en el Boston Evening Transcript, en el que el periodista llamaba por primera vez a René Lacoste "el cocodrilo" (le crocodile). El público americano enseguida se quedó con ese apodo, que reflejaba la tenacidad que demostraba en las pistas de tenis, a no soltar nunca a su presa.

René decidió seguirles el juego y su amigo Robert George, ilustrador, diseñó para él un cocodrilo que fue bordado en el blazer que llevaba a la pista (por aquel entonces aún no era habitual ver jugar a los tenistas en pantalón y camiseta corta), y comenzó a salir habitualmente a la cancha con dicha indumentaria.

► Inicios y evolución de la compañía

Fue entontes, en 1933 cuando este tenista supo aprovechar las oportunidades de su época y su fama (era muy popular en su país por haber ganado tres veces Roland Garros, dos Wimbledon y otros dos US Open) fundando la compañía.

Su primera apuesta fue una camiseta de manga corta, cuello ribete-canalé y tejido de algodón ligero y transpirable a base de petit piqué, a la que le bordó el ahora mítico cocodrilo. Y fue de este modo como nació el polo Lacoste, conocido como el L12.12 en blanco, que se ha convertido en un símbolo de la moda y del marketing y que se mantiene joven pese a sus 80 años. 

Esta prenda fue "revolucionaria" además por otro motivo: era la primera vez que una marca estaba visible en la parte exterior, una idea que, desde entonces, ya nadie discute. 

El éxito no se hizo esperar y la marca no tardó mucho en dar el salto al extranjero. Así, en 1951 comenzó a exportar sus productos a Italia.

Pero ese año tiene otro hito clave en la historia de la empresa: el polo blanco se tiñó por primera vez de colores, algo que con el paso del tiempo la marca iba a seguir aprovechando, incluso sumando distintas tramas.

 

René siguió liderando la empresa hasta 1963, cuando decidió pasarle las riendas a su hijo mayor, Bernard. 

René murió en 1996 a los 92 años de edad en la ciudad costera de San Juan de Luz, dejando como legado una gran compañía, Lacoste, y creando una prenda que revolucionó por su estilo elegante sport (el polo) y cuyo logo es mundialmente conocido.

► Lacoste en la actualidad

  

Bernard, el hijo del fundador, hizo de los colores una de las claves de su liderazgo, que duró prácticamente hasta su muerte, en 2006, a los 76 años.

Los números hablan solos del éxito alcanzado por su gestión: cuando comenzó a liderar la compañía, ésta producía 300.000 artículos al año. En 2005, la cifra rozaba los 50 millones, y la ropa era vendida en 110 países. 

En pocos años, las prendas Lacoste trascendieron al deporte y pasaron a ofrecer una imagen de cierta sofisticación con un toque sport. De hecho, se transformaron en la elección preferida de los que querían un look "de calle" o para el fin de semana. Se trata del estilo que la compañía denomina como "unconventional chic", o elegancia inusual, como fue el lema elegido para las últimas campañas. 

Así, hoy el éxito de la firma, que ya no está en manos de la familia Lacoste (diferentes enfrentamientos entre los descendientes han hecho que la firma pase a manos de terceros), pasa por trasladar la imagen distinguida de su cocodrilo por todo el mundo y a cientos de diferentes productos a través de licencias. Por eso, ya no sólo hay polos Lacoste. Ahora se fabrican desde joyas, perfumes, ropa para el hogar, relojes, bolsos o gafas hasta bicicletas.