Colaboraciones
jueves, 24 de diciembre de 2020
jueves, 1 de octubre de 2020
Cómo organizar el armario aprovechando el cambio de temporada
Tienes un montón de ropa en el armario, pero siempre te pones lo mismo, ¿te suena esta cantinela? No sirve de nada que compres, compres y compres si no lo sabes organizar. El cambio de estación es la excusa perfecta para poner orden en el armario, despedirnos de las prendas que hemos utilizado hasta ahora y dar la bienvenida como se merece a la ropa de nueva temporada.
Es necesario tener las prendas de ropa separadas por estaciones, ya que no es lógico tener un jersey de lana al lado de un vestido ibicenco. De ahí que al menos dos veces al año, una mujer debe organizar su armario, revisando y analizando el contenido de éste de cara a la temporada que corresponda en cada momento.
Antes de entrar en materia y empezar a organizar tu armario, has de tener en cuenta lo siguiente:
- Necesitarás al menos 3 horas de tu tiempo sin que nadie te moleste. Puedes poner música agradable para que se haga menos aburrido, o prepararte un refresco o un zumo para hacerlo más llevadero. Si tienes una persona objetiva que te pueda ayudar muchísimo mejor, si no, hazlo tú misma o busca ayuda de un experto.
- Necesitarás un espejo de cuerpo entero
y ropa interior de calidad, esa que mejor te sienta, con el objetivo de
probarte aquellas prendas que consideres antes de tomar la decisión de
guardarlas o descartarlas.
- Es recomendable haber hecho un estudio de color personalizado para saber qué colores te vienen bien, para así conseguir que todas tus prendas coordinen fácilmente y no tengas colores que te hacen palidecer y te den aspecto de cansada o poco saludable. (Para saber qué colores os favorecen, podéis consultar otra de mis publicaciones anteriores: ¿Cuál es tu armonía de color?).
1) Vaciar y limpiar el armario
Lo primero que haremos será quitar todas las prendas del armario y ponerlas encima de la cama. A continuación quitaremos el polvo, pasaremos el aspirador, limpiaremos las paredes con un paño húmedo o un producto especial para maderas, y pondremos productos antipolillas o ambientadores en su interior.
2) Revisar y clasificar las prendas
A medida que vayamos vaciando el armario, iremos haciendo montones de ropa que agruparemos de la siguiente manera:
► Grupo 1: Ropa que te quieres quedar (conservar)
En este montón pondremos aquellas piezas que utilizamos de forma habitual, las que nos favorecen, las que estén bien conservadas y que sean de nuestra talla.
El paso siguiente puede pareceros más o menos divertido aunque algo cansado pues se trata de probártelo todo o casi todo! Esto, aunque puede ser exhaustivo, es súper recomendable pues solo de esta forma sabrás qué prendas creías que te quedaban bien pero, ups, ya no te sientan, y cuáles en realidad ya no te gustan, o ya no van con tu estilo actual. Relájate y tómate tu tiempo probando distintas combinaciones para llevar tus prendas.
Por ejemplo: coge tu camiseta o camisa preferida y pruébatela. Busca prendas para la parte de debajo del mismo tono o complementario para crear un conjunto completo. Busca chaquetas, cazadoras o chalecos que vayan bien con el conjunto.
Ahora pruébate esa misma camiseta con el resto de tus faldas y pantalones. Verás que existen nuevos looks que nunca habías pensado antes y que ahora que los ves frente al espejo te parecen más interesantes.
Lo siguiente es probarte tu siguiente camisa o blusa favorita y combinarlo con todas las partes de abajo que tengas además de otra parte de arriba ya sea chaqueta, cazadora o rebeca y así sucesivamente con el resto de la ropa.
La idea es que te des cuenta de que tienes un ropero completo de ropa al alcance de tu mano. No se trata solo de prendas sueltas, sino de conjuntos coordinados.
Con este ejercicio te habrás dado cuenta que hay prendas que no combinan con el resto de la ropa que tienes. Quizás se trate de un color que no te favorece o simplemente sea que el corte o el estilo no es el adecuado para ti. Si no te convence esa prenda, retírala del armario y ponla con las prendas para regalar. Si crees que lo único que esa prenda necesita es otra prenda para crear un conjunto, apunta lo que necesites en tu lista de futuras compras y llévala contigo en tu próxima salida.
Una vez terminadas las pruebas, las prendas que hayamos conservado las colocaremos dentro del armario. Esto nos servirá para ver las piezas que realmente nos faltan.
Aquellas prendas que sean de otras temporadas, pero que son de calidad y que pueden combinarse con otras prendas más actuales, las podemos conservar para reutilizarlas y darles un aire nuevo.
► Grupo 2: Ropa que ya no quieres (donar/regalar, vender o tirar)
La decisión de retirar prendas del armario es la que entraña mayor dificultad ante el temor de deshacerse de piezas que en un futuro se puedan echar en falta. Si hay alguna prenda que no estás convencida de eliminar, guárdala en una caja por el momento, para que no te puedas arrepentir, pero que no ocupe un espacio del armario.
Eliminaremos por ejemplo, las prendas que no nos gusten, las que estén muy usadas o mal conservadas (bolitas, desgastadas …), las tallas que ya no hay manera de que encajen con nuestra figura actual, aquellas que hace más de 2 temporadas que no nos las ponemos o las que sean de colores poco favorecedores.
Regálalas o dónalas si están en buen estado, es una buena acción que no te cuesta nada y ayudas a otras personas. Podéis llevar estas prendas a un contenedor de ropa usada o a un centro de ayuda al necesitado, y así las aprovecharán personas que podrán darle una segunda vida.
La ropa que no esté en condiciones, sí deberías de tirarla.
► Grupo 3: Ropa que quieres pero que necesita arreglos
Es aquella que podemos volver a ponernos si le hacemos algún pequeño arreglo de sastrería, o incluso un DIY (Do It Yourself). Ajustar un vestido, unos tirantes, subir un bajo, teñir… son pequeños arreglos que pueden hacer que queramos volver a ponernos esas prendas que teníamos olvidadas en el armario.
Este montoncito puedes organizarlo dentro de una bolsa de tela o en un cajón de tu armario, e ir sacando las prendas de ahí según las vayas arreglando.
3) Criterios para organizar el armario
Organiza toda tu ropa de acuerdo a la estación en curso e intenta guardar ropa de las diferentes temporadas en otro lugar. Por ejemplo: en una caja debajo de tu cama, en un baúl, en una cómoda, etc... Si no tienes suficiente espacio, utiliza un rincón poco accesible de tu armario para ubicar estas prendas.
Es hora de colocar las prendas en el armario, y podemos hacerlo siguiendo varios criterios:
- Por tipo de prenda: chaquetas, pantalones, faldas, abrigos, vestidos...
- Por colores: del más claro al más oscuro.
- Por tipo de uso: ropa de trabajo, ropa de ocio, ropa para ocasiones especiales, ropa para estar en casa…
Es importante que una parte del armario esté destinada a la ropa corta, como camisas, y otro para la ropa larga, como vestidos abrigos y otras prendas largas.
4) Organizar la ropa que va colgada
Si puedes colgar las camisas en perchas individuales, estarán siempre impecables. Una buena opción es colgarlas en perchas antideslizantes con el botón de arriba abrochado.
Pero si el espacio del armario es reducido, aprovecha las que utilices para los pantalones. Si además procuras que estas prendas y los pantalones de la misma percha sean del mismo color, o que sus tonos combinen juntos, ahorrarás tiempo buscando qué ponerte.
En cuanto a los trajes, ponlos todos juntos en la misma parte del armario. Si conservas la percha en la que estaba colgado cuando lo compraste, mejor. Las hombreras pierden su forma en soportes inadecuados.
Vestidos y faldas
Los vestidos pueden clasificarse de 3 maneras diferentes: por colores, teniendo en cuenta de qué temporada son (si son de verano, invierno o entretiempo), o según el estilo (formal, informal). Por ejemplo: vestidos de verano, vestidos para el trabajo, vestidos casual, vestidos de noche, etc.
Cubre los vestidos más delicados (vestidos de boda, de fiesta...) con bolsas para trajes y cuélgalos en uno de los extremos de la barra para colgar, así te molestarán menos y no se estropearán.
Para las faldas, lo mejor son los colgadores o perchas con pinzas, en los que podrás colgar más de una.
Pantalones
Los pantalones de pinzas o aquellos que se arruguen mucho procura colgarlos en perchas. Se mantendrán como nuevos si los sujetas por la parte inferior. Si además los agrupas por colores, te será mucho más sencillo localizar los que quieres rápidamente.
Otra opción es utilizar perchas múltiples donde puedes colgar hasta cuatro pantalones juntos ocupando así menos espacio.
También los pantaloneros son muy prácticos, pero éstos deberían de venir incorporados en el armario desde el inicio porque luego será más complicado adaptarlos al tamaño de nuestro armario.
Los vaqueros u otros pantalones de sport pueden doblarse y guardarse en un cajón o en un estante, poniendo los más claros arriba y los más oscuros abajo.
Abrigos y cazadoras
Los más delicados y valiosos los guardaremos dentro de fundas, preferiblemente de tela, y los abrigos y chaquetas de diario o bien los guardamos en un perchero o burro o también en el armario.
5) Organizar la ropa que va doblada
En lo relativo a la ropa doblada, podemos usar las baldas para la más voluminosa, como jerséis y camisetas, y los cajones para la ropa interior y los complementos. En general, a la hora de doblar no hay que hacer más de tres pliegues, ya que la prenda gana volumen y ocupa más.
Camisetas y jerseys
Las camisetas, los jerseys y las prendas de lana pueden doblarse pero con cuidado de no arrugarlas y sin hacer grandes montones. Debes tener un acceso fácil a ellas y que las prendas de abajo no soporten casi peso. Podemos guardarlas en un cajón o en uno de los estantes.
Deberíamos de colocar las camisetas de manga larga en la misma balda, cerca de las manga corta y ordenadas por colores lisos o tonos de estampado. ¿El motivo? algunas las podemos aprovechar unos meses más como los tops o camisetas si le añadimos una chaqueta o blazer. Esto ayudará a encontrar lo que queremos ponernos y a no ponernos siempre lo mismo.
Ropa interior y calcetines
El mejor modo de ordenar la ropa interior es contar con una pequeña cajonera. Divide el interior de los cajones con un sistema de tablillas o con un sencillo organizador básico de tela.
Los calcetines ni en bola, ni uno dentro del otro. Dóblalos por la mitad y colócalos de lado creando una fila. Los clips para las parejas requieren tiempo: hay que ponerlos y sacarlos.
6) Organizar el resto de accesorios
Joyas y complementos
Una de las cosas que más quebraderos de cabeza nos trae son las joyas y los complementos. Utiliza baldas a media altura para colocar sombreros y gafas de sol y cuelga tus collares por colores en un colgador especializado.
Puedes aprovechar la cara interna de las puertas para poner un colgador para cinturones, pañuelos o bolsos pequeños. Si tienes muchos pañuelos, fulares y pashminas, quizá debas hacerte con un colgador de aros. Es cómodo, porque no hace falta tener todo doblado.
Bolsos y zapatos
Los bolsos y zapatos tienen su lugar propio. Colócalos de tal manera que puedas acceder a ellos sin dificultad.
Guarda los zapatos que no te pones a diario en cajas transparentes para que te permita ver los zapatos que hay dentro sin necesidad de abrir las cajas. El calzado de temporada ponlo a la vista en un zapatero adecuado.
Consejos finales
Para mantener el orden en tu armario debes evitar que éste se llene completamente. Un armario ordenado sin margen de maniobra, hará que todo vuelva a desordenarse al poco tiempo de uso. Es vital que te deshagas de aquellas cosas que ya no usas para que no ocupen espacio innecesariamente.
Además en muchas ocasiones la distribución del propio armario no ayuda, ya que no suele tener suficientes compartimentos. Este problema tiene fácil solución gracias a los organizadores de ropa y calzado que existen actualmente en el mercado (como por ejemplo los que puedes encontrar en Ikea, marca líder en aprovechamiento de espacios). Diferentes piezas en las que podrás colocar cómodamente todas tus prendas y accesorios, facilitándote así la tarea de la elección de cada día y, por supuesto, ayudándote a mantener siempre el orden. Ejemplos:
- Percha con círculos en la que podrás colocar cinturones, pañuelos, fulares y similares sin ocupar más espacio que el de una percha común.
- Columna de tela con varios compartimentos, la podrás colgar en la barra y utilizarla no solo como estantes, sino que sus laterales también tienen bolsillitos en los que podrás seguir almacenando más complementos.
- Canastillo de varias casillas para complementos en las que podrás tener en orden calcetines, cinturones...
- Cajas con ventanilla frontal para que veas su interior, ideales para guardar los zapatos.
martes, 22 de septiembre de 2020
Los colores para el otoño-invierno 2020-2021
Colores que según el informe Pantone Fashion Color Report Fall 2020, que se lanzó mundialmente coincidiendo con la New York Fashion Week, son los protagonistas de esta temporada Fall-Winter 2020-2021.
Esta vez el Fashion Color Trend Report de Pantone cuenta con dos variantes, una que hace referencia a los colores vistos en la pasarela de la New York Fashion Week FW20-21 y otra con los de la London Fashion Week FW20-21.
«La paleta de colores para Otoño/Invierno 2020/2021 ofrece una rica narrativa que pone de manifiesto nuestro deseo de tener colores versátiles y atemporales. Hemos despojado nuestra paleta de cualquier exceso, en línea con la mentalidad de que “menos es más”, una idea que cobra una importancia cada vez mayor entre unos consumidores que priorizan el valor y la funcionalidad», afirma Leatrice Eiseman, Directora Ejecutiva del Pantone Color Institute.
«Empapados de fortaleza y personalidad, los colores de la temporada Otoño/Invierno 2020/2021 estimulan nuestro continuo afán por expresarnos de manera singular a través de afirmaciones visuales inusuales y creativas que llaman la atención».
La nueva paleta presenta 10 colores de moda así como 4 tonos neutros clásicos.
viernes, 22 de mayo de 2020
Los colores para la primavera-verano 2020
Paleta de Primavera-Verano 2020 para la New York Fashion Week:
jueves, 30 de enero de 2020
Pantone color of the year 2020!
El color Pantone del año lo eligen los directivos de la firma y unos 40 expertos de todo el mundo que tienen en cuenta factores como la coyuntura económica, las películas o canciones del momento, las cuestiones sociales... Primero se decide una gama de color y después se piensa qué tono concreto puede representar mejor el año.
Según el Pantone Colour Institute®, el color que destronaría al Living Coral de 2019, y que reinará durante todo el 2020 es: Classic Blue, o lo que es lo mismo, el Pantone 19-4052.
¿Qué transmite el Classic Blue?
El Classic Blue o azul clásico es una tonalidad ideal, un azul que “infunde calma, confianza y conexión, aporta sensación de paz y tranquilidad al espíritu humano y ofrece refugio; además facilita la concentración y aporta claridad para ayudar a enfocar de nuevo los pensamientos”, según los especialistas en el color Pantone.
Ante los sentimientos de inestabilidad en el mundo de hoy, se decidió por un tono que ofrece la tranquilidad, la confianza y la conexión que las personas pueden estar buscando en un entorno global incierto.
¿Cómo usar este color y con qué otros colores combina?
Se puede combinar con diferentes colores para crear paletas inspiradoras y es aplicable a todos los ámbitos. A continuación os muestro algunos ejemplos de paletas de color que incluyen el Classic Blue, y sus posibles combinaciones.